jueves, 25 de octubre de 2012

Viaje a la semilla de Mai


 Etapas que se cierran y nuevas oportunidades que vienen en camino. Estoy finalizando la escuela secundaria. Los años que muchas personas desearían volver a vivir una y mil veces.

 Me encuentro en momentos de decisión ¿Dónde estudiar? ¿Qué carrera elijo? Muchos tienen la respuesta pero para otros les resulta muy difícil encontrarla… También se hacen difíciles las decisiones grupales en cuanto al elegir el motivo de la bandera, color de buzos de egresados, con que empresa viajar a Bariloche… Con mis compañeros nos conocíamos hace pocos años, pero no tenemos la suficiente confianza aún para tomar tales decisiones. Siempre existe ese tipo de rivalidad que no logramos entender en ambos grupos. Estar en un piso superior al que nos encontramos, supongo que estaría bueno, espero que no cambien mucho las materias, pero tenemos nuevas porque estamos dentro del nuevo programa de educación y no existe más Polimodal para nosotros. Somos el primer grupo que “estrenaríamos” este modelo educacional. Las fiestas de todos los fines de semanas se hacen costumbre, y sí, la mayoría de nosotras cumplimos 15 y todas deseamos la maravillosa fiesta que con mucho esfuerzo muy pocas chicas tienen la oportunidad de realizarla. Buscar el vestido perfecto para esa noche no es una tarea fácil. Ir cada dos por tres a probarte el vestido es la parte divertida y lo disfruto mucho con el apoyo de mi hermana. También buscar todos los detalles, me gusta.

 Es raro volver a hacer nuevos amigos. Es un cambio brusco y más a esta edad. Ya empiezo secundaria, un año antes, y ya me doy cuenta de que no vivo más en Capital; tarde o temprano tenía que caer a tierra, aunque no me gusta la idea de tener que mudarme. Me encuentro perfecta con mis amigos de ahora, corriendo de acá para allá en aquel pasillo largo donde conocí por primera vez unos años anteriores… ver ese mástil con esa base donde disfrutamos cada tarde con la maestra María. También aquel escenario donde corrí cuando apenas llegué y desaparecía, poco a poco, como si me indicara algo…
Estoy en este lugar de nuevo, pero con juegos, donde disfruto mucho jugar con mis amigos, en especial con Daniela y Noelia. Son mis mejores amigas y siempre nos juntamos después del jardín a pesar de salir a las 4 de la tarde…
Me pregunto porqué yo sola voy al baño, y los otros nenes usan pañales todavía, ¿Acaso sus padres no les enseñaron ir al baño como lo hicieron conmigo? La maestra está muy orgullosa de mi y siempre me elogia cuando pido ir al baño y que la seño solamente tenga que acompañarme. Sigo sin comprender porqué tengo que venir acá y no puedo estar en casa siempre con mamá y papá o mis hermanas… Quizás porque trabajan y estudian y no puedan cuidarme. Sin embargo, disfruto mucho este lugar porque me divierto mucho. Estoy en casa nuevamente, mamá y papá me llevan a distintos lugares a pasear y hablan con muchas señoras de guardapolvo a cuadrillé. Uso pañales y chupetes y todo es muy grande. Estoy en una nueva casa, espero no tener que seguir moviéndome de casa. Esta me gusta, tengo un patio y no es como mis otras casas que eran muy altas y sólo tenía un patio muy pequeño donde mi mamá debía cuidarme todo el tiempo por el balcón. Dios no quiera, se cayera o simplemente yo lo haga. No tengo mucho lugar para caminar y practicar mis pasos aunque prefiero mi vehículo con ruedas, con el logro aumentar la velocidad aunque muchas veces me caiga y me lastime…

Descubrí que llorando mi mamá viene y me alimenta, o me cambia el pañal, cuando él mismo me molesta también. Tienen muchos cuidados sobre mí, en especial mamá cuida que no me saque la venda que tengo del lado derecho de mi pecho… No sé qué será.
 Mamá y papá me llevaron a un lugar enorme, tiene pasillos que parecen laberintos, como me gustaría jugar. Pero estoy con una consulta medica, cuando llegó mi turno me vieron 3 personas distintas, nunca la había visto pero si eran muy jóvenes. Hablan con mis papás acerca de una operación…

 No logro distinguir a nadie, no sé quién es quién, sólo reconozco a mamá y a papá por la forma que me abrazan y me ponen en su pecho para que duerma, papá me levanta con una mano, ¡es muy fuerte! ¿Cómo alguien podría hacer esto? ¡Es increíble!

 Me encuentro en un lugar completamente oscuro donde mi movilidad es totalmente nula y cuando siento algo nuevo dentro de mi pancita doy patadas de alegría y alguien me toca a través de una tela mi pie, también escucho voces pero no logro distinguirlas.

Maira Gutiérrez

1 comentario: